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Aspecto actual del pantano San Roque, de Guareña, con poca agua todavía.
Tras la retirada de lodos del pantano la cuenca gana 92.970 m3

Tras la retirada de lodos del pantano la cuenca gana 92.970 m3

La nueva capacidad es de 143.708,50 m3 y actualmente la superficie de zona embalsada es de 61.918,92 m2, y la máxima profundidad de agua que existe es de 4,379 metros.

PEDRO FERNÁNDEZ LOZANO

Domingo, 18 de febrero 2018, 16:56

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Tras la reforma sufrida en el pantano San Roque de Guareña, principalmente tras ahondar su cuenca, la nueva capacidad es de 143.708,50 m3. Apenas tiene agua porque apenas ha llovido, pero esos son los cálculos de los técnicos.

La cota de aliviadero fue modificada hace unos años, ya que fue picado el labio en un metro aproximadamente. Según las mediciones del técnico Ángel Cecilio Lozano Ruiz, la cota actual del aliviadero es la 290.579 m. Con respecto a esta cota, que es con la que se han efectuado los cálculos de la nueva capacidad del pantano, la antigua del mismo, es de 50.738,36 m3, según las estimaciones de Lozano.

Tras la retirada de algo menos de 80.000 m3 de tierra sobre perfil, según el delegado de obras en el Ayuntamiento de Guareña, Juan Carlos Fernández, la nueva capacidad del pantano es de 143.708,50 m3.

Actualmente y según los números del técnico Lozano Ruiz, la superficie de zona embalsada es de 61.918,92 m2. La cota tope de la presa es la 293,459 m y la cota mínima a la que ha quedado el fondo es la 286,20 metros en la zona del antiguo desagüe, "aunque una vez que nos apartamos de esta zona la cota sube a 287 metros", dice. La máxima profundidad de agua que existe en la actualidad es de 4,379 metros en la zona del desagüe con respecto a la cota de aliviadero existente.

El trabajo realizado por Ángel Cecilio Lozano, Ingeniero Técnico en Topografía de profesión, ha consistido en hacer un levantamiento fotogramétrico realizado con aeronaves pilotadas por control remoto (drones) para saber la nueva capacidad del pantano, "se ha procedido a hacer una visita previa a la zona, se situaron una serie de puntos de apoyo con GPS y enlace a la Red Extremeña de Posicionamiento, planificación del vuelo con Rpas, realización de vuelos, y posteriormente se procedió al post procesado de las imágenes y generación de resultados con programas de restitución fotogramétrica de correlación automática", explicó para este medio.

Los cálculos efectuados por Lozano han sido con programas de diseño asistido por ordenador. Se ha cedido al Ayuntamiento el primer levantamiento fotogramétrico realizado antes de la retirada de los lodos, ya que éste fue realizado altruistamente, según explica Ángel Cecilio para HOY Guareña.

Historia

Hace 16 años se realizó un estudio sobre la batimetría del pantano San Roque, por un estudiante de topografía, Abel González Ramiro, con la ayuda de su profesor Tomás Cortés Ruiz, que sirvió como proyecto de fin de carrera de aquel estudiante que, curiosamente, hoy es alcalde del municipio.

El pantano data de los años 70 y a él se accede bien por la carretera de Manchita (entonces BA-V-6041, y hoy BA-087) a la altura de un kilómetro, aproximadamente. La presa es de tipo de gravedad de materiales sueltos, protegida de escollera granítica visible y de pequeña altura (no pasan de cinco metros).

La zona embalsada es de una superficie de seis hectáreas, y su zona de recreo 23 hectáreas.

Los datos del embalse allá por 2002, recogidos por el estudiante González, la cota de máximo embalse (cota de aliviadero) era de 294,51 metros sobre el nivel del mar (Alicante). La superficie máxima ocupada a cota de máximo embalse (a ras de aliviadero) era de 77.674,874 metros cuadrados, y el volumen máximo que acumulaba en cota de máximo embalse (a ras de aliviadero) era de 113.920,402 metros cúbicos.

El punto más bajo del pantano sumergido, entonces, se encontraba en la cota 289,40 metros sobre el nivel del mar, por lo que la profundidad máxima de agua era de 5,11 metros, o lo que el punto más bajo se encontraba a esta profundidad.

El pantano cuenta con un aliviadero libre con desagüe de fondo tapado.

Según los técnicos entonces, pensaban que no sería conveniente mayor profundidad del pantano porque la presa no soportaría el volumen de agua acumulada, ya que sufre daños por escape cercano al aliviadero y ha de tratar de evitarse con sistemas de defensa, "pues para que no haya filtraciones lo lógico, decían, es necesario instalar núcleos impermeables (materiales arcillosos)".

Los pinos fue otra opción de defensa natural para evitar las correntías del terreno, por sus especiales características.

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