

PEDRO FERNÁNDEZ LOZANO
Martes, 18 de julio 2017, 08:52
Sigue el fervor en Guareña hacia la imagen de la Virgen del Carmen. El domingo fue su día grande, la festividad onomástica de la Reina del Carmelo. Por la mañana ofició la misa en Santa María, Juan Pedro Hernández, misionero en América, diocesano de Plasencia, que fue invitado a vivir la fiesta religiosa en la localidad.
Por la tarde, San Gregorio cobraba protagonismo, un año más, tras custodiar en su iglesia la imagen de la Virgen del Carmen que data de 1928. Una imagen que se realizó en la Casa Bochata, de Barcelona, donde se erigían todo tipo de arte católico. De allí llegó a Guareña la imagen donada por Carlota López Mateos para presidir la primera novena en honor a esta imagen que todavía conmueve a mucha gente. El fundador de la cofradía fue el párroco por entonces de San Gregorio, Pedro Isidoro Palomares.
A las 21.00 horas salía la procesión del Santo a los sones de tambores y cornetas de la agrupación musical de la Unión de Cofradías de Guareña. El centro de atención era la Virgen que estrenaba corona de plata, con una base colmada de flores, y portada por mujeres.
Calle Espronceda
Las calles por donde pasaba la Virgen se veían engalanadas con mantones, colchas, paños de balcones con la imagen, macetas en las aceras, y altares con motivos marianos en honor a la Virgen del Carmen. Pero la sorpresa saltó cuando la comitiva religiosa llegó a la calle Espronceda. Los vecinos de esta calle decoraron de principio a fin de la vía no solo balcones, puertas, aceras sino que sobre el asfalto dibujaron con cal y pintura flores, cenefas, ribetes que se convirtió en lo más destacado en decoro de la procesión. El cura Albalate destacó el trabajo y la dedicación de los vecinos por contribuir en dar más realce a la procesión de la Virgen del Carmen en Guareña. La calle Espronceda gustó a todos.
Continuó por Arroyo y por una acera y otra las vecinas ofrecían flores a la Virgen, improvisados recitales a la Reina del Carmelo, y el escapulario se ofrecía al beso de personas impedidas, mayormente personas mayores. La calle Luis Cernuda y Salsipuedes fueron las que remataron el itinerario procesional hasta culminar en San Gregorio donde la agrupación musical recibió a la Virgen que entró en su templo hasta su vuelta de otro 16 de julio.
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